sábado, 3 de marzo de 2012

Quot capita, tot sententiae (tantas opiniones como personas)

No me ha interesado tener diatriba alguna con el tema de los toros. El tema de los toros es algo que a mí me interesa. Es una realidad a la que no podemos volver la espalda. Identifica a un gran grupo de personas de todos los estamentos sociales ( tan importantes como los ensayistas, músicos y novelistas del siglo XIX ) que, además de ser partidarios de la defensa del mundo animal, consideran que las tradiciones no pueden suprimirse imponiendo una opinión sobre las demás. 

Tampoco tiene justificación alguna inundar los muros de los demás en las redes sociales con estas opiniones monotemáticas porque, quizás, a tenor de  todo el derecho de utilización de un espacio propio, pueden conducir a vetar en sus muros a quienes usan esos lugares para conseguir propagar opiniones con intereses particulares o de un determinado grupo de opinión. 


Confeccionen ustedes sus propios foros y blogs y que accedan a ellos quienes estén interesados en esos temas. Nunca ha sido mi intención imponer opiniones. Ni siquiera he pretendido sugerir justificación alguna al cumplimiento de esas fiestas tradicionales para algunos indignas del comportamiento humano. Como tampoco he pretendido sugerir la idea de que cualquier sometimiento de un animal y su privación de libertad puede no estar en modo alguno justificada..


Quien quiera atacar el mundo del toro y todo lo que el mismo mueve, tiene otros foros oficiales u oficiosos a los que dirigirse para exigir, si tienen derecho a estas exigencias, las acciones oportunas para que esta manifestación del folklore y la tradición española desaparezca. 


Mi bitácora del día dos de marzo de este año 2012 es un homenaje al tesón y la fuerza de voluntad de un ser humano que quiere sobreponerse a un acontecimiento que le sucedió en su lugar de trabajo, el ruedo,  y que no ha querido que ese suceso destroce su vida.


Frases del día:



“Si nuestro teatro tuviese el temblor de las fiestas de toros, sería magnífico. Si hubiese sabido transportar esa violencia estética, sería un teatro heroico como La Iliada... Una corrida de toros es algo muy hermoso”
Ramón María del Valle-Inclán

La historia del toreo está ligada a la de España, tanto que sin conocer la primera, resultará imposible comprender la segunda.
José Ortega y Gasset

Si yo fuese dictador en España, prohibiría las corridas de toros; como no lo soy, no me pierdo ni una.
Ramón Pérez de Ayala




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