Siempre que llegan estas fechas se me vienen a la memoria las procesiones de Semana Santa de Toledo y de Madrid. Yo no he tenido la suerte de poder desplazarme hasta Sevilla para poder contemplar la belleza de sus vírgenes, la pulcra serenidad y seriedad de sus cristos y la profunda piedad ritual y ancestral de cofrades y feligreses. Ni me ha sido posible, porque no ha coincidido, desplazarme hasta Murcia para contemplar las imágenes de Salzillo o hasta Valladolid para poder sentir esa adusta fé de los castellanos y de las tallas de Gregorio Hernández. Pero no me he perdido las procesiones de Toledo en mi pubertad y juventud, ni las de Madrid en mi edad adulta.
En Toledo hoy, Jueves Santo, procesionan las imágenes de "La Oración del Huerto", talla en madera de pino policromada del escultor toledano toledano D. Luis Martín de Vidales,
"El Cristo Amarrado a la Columna" del escultor Juan Guas (madera policromada del siglo XVI ),
"Nuestro Padre Jesús Nazareno" talla en madera policromada del siglo XVIII que se conserva en la iglesia de Santo Tomé,
"Santísimo Cristo de la Agonía", talla anónima del siglo XVI
y la "Virgen del Amparo" del escultor toledano Cecilio Vejar restaurada en el año 2001 por Enrique Toledo Brazal.
Toledo, en estas fechas, con sus calles estrechas por las que apenas caben los pasos suponen un añadido para el recogimiento y el fervor.
En Madrid estamos esperando si los hermanos mayores de las cofradías que deberían procesionar van a decidir que procesionen o no por miedo a los chaparrones que pueden estropear los policromadosdelas imágenes. El Jueves Santo procesionan en Madrid las siguientes imágenes:
"Nuestro Padre Jesús Nazareno "El Pobre"",de autor anónimo del siglo XVI ,
"María Santísima del Dulce Nombre" Talla de 1999 de la escultora Lourdes Hernández,
A las dos imágenes anteriores los costaleros tienen que ponerse de rodillas para poderlas sacar de la iglesia de San Pedro "El Viejo".
"El Divino Cautivo", talla realizada en 1944 por Mariano Benlliure,
"Nuestro Padre Jesús del Gran Poder", talla de José R. Fernández Andes del siglo XX
y "María Santísima de la Esperanza", talla de Antonio Eslava Rubio también del siglo XX.
Al final, en Madrid, procesionan con un recorrido más corto Jesús "El Pobre" y María Santísima del Dulce Nombre. No se si lo harán el resto de las imágenes.
"Si las procesiones no existieran habría que inventarlas de nuevo para que el pueblo pudiera admirar tan preciosa y variada imaginería con la que cuentan hasta los pueblecitos más pequeños del mundo hispano."
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