jueves, 8 de marzo de 2012

Escudos de la Villa de Madrid: ¿Sólo osos y madroños?

Hoy día 8 de Marzo de 2012 la mañana ha sido con una temperatura agradable, intervalos de cielos despejados y nubes y viento del sureste. La tarde, bastante más fresca que la mañana. Cuando se ha puesto el sol, aunque la temperatura en la zona norte de Madrid era de 10 grados el viento acentuaba la sensación de frío.


(Documentación obtenida en parte directamente de Joaquín Carrascosa, mi vecino, y en parte de Wikipedia)


Es muy posible que mis seguidores sean unos expertos tan especializados en heráldica, que lo que les voy a contar no les resulte interesante. A pesar de ello, y como homenaje a un querido y admirado vecino (Joaquín Carrascosa) de la planta 13 del edificio en el que vivo que me entusiasmó un día con sus historias de Madrid, contadas de viva voz, y con la documentación gráfica de sus conocimientos publicados en el año1981 sobre Los Escudos de la Villa de Madrid, me atrevo a haceros partícipes de estos conocimientos.

La creencia general es que, desde el siglo XIII, el oso y, posteriormente, el oso y el madroño fueron los únicos motivos, combinados con las siete estrellas de la osa mayor, del escudo de Madrid. Mi vecino Joaquín me pudo demostrar que, originariamente, y en épocas anteriores al reinado de Fernando III EL Santo, el escudo estaba formado por una piedra de pedernal sumergida en su base inferior en agua orlada con una cinta azul en su parte superior y las cabezas de dos grifos que sujetan unos cordones , rematándose su parte inferior por unas espigas, dos soles y el cráneo de una cabeza de carnero. Una leyenda en su derredor permitía conocer los orígenes de la ciudad con la frase: "Sobre agua me fundaron y mis muros fuego son", haciendo referencia al río cercano y  al color rojizo que desprendían las piedras de pedernal de la muralla al reflejarse en ellas los últimos rayos del sol poniente. Una placa en la Calle de Madrid ostenta este escudo como muestra de su veracidad histórica.


Antes del siglo XII, durante la conquista de Sevilla los soldados de la villa llevaban en sus estandartes y sus escudos un oso andando y pastando sobre el suelo verde con un fondo plateado. En el lomo del oso se distriibuían las siete estrellas de la constelación de la Osa Mayor.
En 1202 habían surgido desavenencias entre el concejo y la clerecía por el disfrute del monte y tierras de pasto de ciertos montes en los alrededores de Madrid. El pleito duró veinte años. Llegaron por fin a un acuerdo en 1222 y la concordia se estableció en los siguientes términos:
  • Se daría a la Villa de Madrid todos los pies de árbol y la caza.
  • Se daría al Cabildo eclesiástico todos los pastos.
Para que el acuerdo quedara bien sellado y para memoria de todos se acordó que el escudo de la villa llevaría el oso con el añadido de un árbol, y el escudo del cabildo llevaría el mismo animal paciendo en unos pastos. Se modeló de nuevo el escudo al que se le añadió además del árbol una orla azul y sobre ella las siete estrellas de ocho puntas (tres a los lados y una abajo) que antes estaban sobre el lomo del animal. El oso, empinado al tronco, para indicar la posesión de pie de árbol.

Detalle del escudo de Madrid en la fuente de la Alcachofa del Parque del Retiro.

No se sabe con certeza en qué momento se empezó a asegurar que el árbol del escudo era un madroño. Ha sido una tradición muy tenaz y muy firme. Para apoyar esta tradición, el Ayuntamiento de Madrid viene sembrando desde hace algún tiempo, en elRetiro y otros jardines el madroño (Arbutus unedo). Pero se ha demostrado que en esta zona de Madrid no hubo madroños, al menos no los hubo en abundancia y como bosque. En cambio dicen los científicos que sí hubo profusión de un árbol llamado almez o lodón, que era una especie autóctona del lugar. Este árbol tiene también unos frutos rojos de pequeño tamaño. 
En 1554, el rey Carlos I distinguió a la ciudad de Madrid con los títulos de coronada e imperial, otorgándole la corona real en el escudo.Dicha corona se dibujó sobre la copa del árbol y así estuvo durante bastantes años. En el siglo XVII el cronista de la villa de Madrid Juan López de Hoyos, cuenta que la corona se cambió a la cima del blasón.



En 1859 se estableció el primer escudo de la villa desde la constitución de los ayuntamientos constitucionales. Se componía de dos cuarteles y manteladura. En el cuartel la derecha, sobre campo azur, se encontraba la figura de un grifo de oro. En el de la izquierda, sobre campo de plata, un madroño sinople con frutos de gules y un oso empinado a él, lenguado de gules. El terrazado era sinople también. En la bordadura del cuartel de azur, se encontraban siete estrellas de oro de cinco puntas. En la manteladura, sobre campo de oro, se encontraba una corona cívica, concedida a la villa de Madrid por las Cortes Españolas en un decreto promulgado el 27 de diciembre de 1822, durante el trienio liberal. La corona cívica estaba formada por un trenzado en guirnalda de hojas de roble y una banda carmesí.

Archivo:Escudo antiguo de la Villa de Madrid.svg

Últimamente el escudo de la villa de Madrid ha quedado reducido al Oso, el madroño y las siete estrellas de la Osa Mayor






Frase del día:
" Todo lo que ignoramos podemos transformarlo en parte de nuestra propia historia si nos fiamos de la documentación que, gráfica u oralmente se nos ha trasmitido".


Gracias, Joaquín. 















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